Exactamente 38 años después, el “Fla” se coronó campeón de América.
Flamengo consiguió su victoria más importante en las últimas tres décadas al derrotar a River Plate en la final de la Copa Libertadores. Con un doblete in extremis de Gabriel Barbosa, el “Mengao” venció a un conjunto “Millonario” que dominó el partido pero se quedó con las manos vacías.
Una final impensada
Brasileros y argentinos se daban cita en Lima después de un importante trasegar a causa de la situación de orden público en Santiago de Chile (sede designada en un principio por la Conmebol). Tras idas y vueltas de la organización, el pasado 5 de noviembre se decretó que la sede definitiva sería el Estadio Monumental de la capital peruana.
La segunda en 38 años o la tercera en 5
De un lado estaba el fuerte equipo de Rio de Janeiro, integrado por nombres de grueso calibre como el portero Diego Alves, los laterales Filipe Luis y Rafinha y el delantero Gabriel Barbosa.
Hombre récord
Barbosa o “Gabigol”, es celebre por romper el récord histórico de la mayor cantidad de goles anotados en una sola edición del campeonato brasilero para el “Rubro-Negro”. Marca que sostenía a la fecha el mítico mediocampista Zico, una de las grandes figuras del primer título continental de los cariocas, obtenido en 1981.
Por la hazaña
En la otra vereda, se encontraba el conjunto de Buenos Aires, compuesto por grandes figuras como el arquero Franco Armani, el mediocampista Enzo Pérez y el atacante Rafael Santos Borré, entre otros.
Los “Millonarios”, buscaban consagrarse campeones de América por tercera vez en un periodo de cinco años. Algo que solamente habían logrado Independiente (4 veces en 1972, 1973, 1974 y 1975), Estudiantes de la Plata (3 veces en 1968, 1969 y 1970) y Boca Juniors (2000, 2001 y 2003).
Inicio entretenido
El conjunto brasilero, dirigido estratégicamente por el portugués Jorge Jesús, se plantaba en el terreno de juego con un esquema táctico de 4-2-3-1. El único atacante de referencia en el “Mengao” era su artillero estrella, Gabriel Barbosa.
Por su parte, el club argentino, conducido por Marcelo Gallardo, se posicionaba en el césped con una disposición de 4-1-3-2. Los delanteros de arranque en el equipo de la “Banda Cruzada” eran Matías Suárez y el colombiano Rafael Santos Borré.
En el inicio del encuentro, el club argentino se hacía con la posesión del esférico y el control de la media cancha. Así, en el minuto 14 del partido, los “Millonarios” abrirían el marcador por medio de Rafael Santos Borré. El atacante colombiano mandó un disparo con pierna diestra rastrero tras un pase formidable de Enzo Pérez por el costado diestro del ataque.
Error defensivo
El balón, que parecía no tener mucha fuerza tras el centro, fue obviado por los volantes Willian Arao y Gerson. Detrás de los jugadores del “Mengao”, estaba al acecho el delantero nacido en Barranquilla, quien mandó el zapatazo letal al fondo de la red.
El esférico ingresó por el costado izquierdo de la valla defendida por Diego Alves. El portero ex Valencia CF, se estiró pero no pudo hacer nada para evitar el tanto inicial del conjunto argentino. Así, el resultado parcial de la gran final era una trabajada victoria por la mínima diferencia de River Plate ante un sorprendido Flamengo.
Poderío “Millonario”
Sobre la mitad del primer tiempo, el dominio del conjunto argentino era notorio. Los de la “Banda Cruzada” dominaban el balón y además hacían un trabajo de despliegue excepcional que abarcaba todo el campo de juego del Estadio Monumental. Entre tanto, el equipo “Rubro-Negro” estaba totalmente alejado del arco defendido por Franco Armani y no encontraba el camino para potenciar el frente de ataque.
En el minuto 36, la oportunidad de anotar sería para Exequiel Palacios tras un pase excepcional de Santos Borré después de un contragolpe perfectamente ejecutado. El remate del mediocampista argentino, se iría desviado rozando el palo de la mano diestra del arco defendido por Alves.
Sin muchas más emociones en el cierre de la primera mitad, el árbitro chileno, Roberto Tobar decretaría el final de los primeros 45 minutos en Lima. El resultado parcial de la gran final era una merecida victoria de River Plate ante un desconocido conjunto de Flamengo.
Despertaron
Ya en el segundo tiempo, el conjunto brasilero intentaría encontrar los espacios por las bandas. Así, en el minuto 57, desbordó Bruno Henrique por el costado izquierdo del ataque y después mandó un centro que sería impactado en primera instancia por Gabriel Barbosa. El esférico sería detenido de manera conjunta por Lucas Martínez Quarta y Nicolás de la Cruz. Después, el balón recayó sobre Everton Ribeiro, quien mandó un último remate que sería detenido de manera magistral por Armani.
En esta jugada, los asistentes del VAR analizaron una posible mano del mediocampista uruguayo en el momento del primer despeje. Después de unos segundos, determinaron que la infracción era inexistente y dieron continuidad al partido con normalidad.
Sobre la mitad del segundo tiempo, el “Mengao” adelantaba sus líneas de ataque con el propósito de generar más peligro en la valla “Millonaria”. La respuesta del equipo argentino era recuperar el balón en área propia y después llevar a cabo arremetidas veloces por medio de contragolpes certeros.
Fútbol en estado puro
Si bien el conjunto argentino dominaba el partido con tranquilidad por el buen resultado en su favor, los brasileros empezaron a tomar la iniciativa en ataque. Las arremetidas del “Mengao” por los costados eran cada vez más peligrosas para el área rival.
Así, en el ocaso del encuentro llegaría el empate del club “Rubro-Negro” con una definición excepcional de Gabriel Barbosa tras un desborde admirable de Giorgian De Arrascaeta. El uruguayo, puso un balón como con la mano para que el artillero brasilero mandara a guardar el esférico en el fondo del arco “Millonario”. Con tan solo un par de minutos por jugarse, Flamengo neutralizaba la victoria inicial de River Plate
Alegría total
En un giro inesperado, como los del verdadero fútbol, el equipo brasilero no solamente empataría el juego sino que pasaría a ganarlo en el minuto 92. El encargado de rematar sería de nuevo Gabriel Barbosa. Este, recibió un pase elevado desde su propia área por parte de Pablo Marí y tras dejar en el camino a Javier Pinola, sacó un zurdazo letal que le daba la Copa Libertadores al “Mengao”.
Tras el gol, se generó una escaramuza que sería aliviada por el árbitro al expulsar de manera simultánea a Exequiel Palacios y al mismo Barbosa. Una vez salieron los jugadores, el juez decretó el final del encuentro y de esta manera la gran final era para Flamengo ante un incansable River Plate.
En tan solo tres minutos, los “Rubro-Negros” remontaron el encuentro con un par de genialidades de “Gabigol” y se coronaron con su segunda Copa Libertadores de América.
Reacciones del partido
“Hicimos un partido malo, River juega muy bien y presiona muy bien. Pero al final, el destino quiso que nos lleváramos la gloria. Soy el hombre más feliz del mundo. River sabe cómo jugar finales y logró parar nuestro juego, el campo tampoco ayudó pero nosotros no paramos de intentarlo. Las finales son así e hicimos los goles para que el trofeo sea nuestro”. Indicó a la cadena Fox Sports el lateral del Flamengo, Filipe Luis, una vez finalizado el partido.
“Estos partidos donde los dos equipos son tan parejos son difíciles. Encontramos el gol por un robo en el campo de ellos. Ellos encuentran el gol por un error nuestro. Cualquiera de los dos se lo merecía por el gran campeonato. Solo nos queda trabajar por nuevos objetivos y si Dios quiere, estar el año que viene de nuevo en una final. Solo queda felicitar al Flamengo”. Señaló a la cadena Fox Sports el mediocampista de River Plate, Enzo Pérez, una vez terminado el partido.
Lo que viene
El Flamengo tendrá la oportunidad de presentar la Copa Libertadores a su hinchada el próximo 27 de noviembre en la fecha 35 del campeonato brasilero cuando enfrente al Ceará.
Por su parte, River Plate tratará de pasar el trago amargo de la derrota continental cuando enfrente el próximo 27 de noviembre a Central Córdoba en la final de la Copa Argentina.
Imágenes: Flamengo en Twitter