Los Rojos no pudieron contra los Árabes, a pesar de ser locales
Los integrantes del Cliftonville, club de fútbol irlandés del norte de Belfast, sucumbió en su casa al buen planteamiento de los noruegos del FK Haugesund.
Jostein Grindhaug, el entrenador de los visitantes lo había soñado desde antes.
Deseó que el día del partido su equipo marcara primero, y esa fue la alegría que le dio su delantero y capitán del equipo, Christian Grindheim.
Justo antes de que los 22 jugadores se fueran al descanso del primer tiempo, en Belfast, el futbolista anotó el primero y, a la postre, único gol del juego. Fue un remate con la derecha, desde muy cerca, por el lado derecho de la portería.
El que pega primero… pega mejor y eso hicieron los visitantes
FK Haugesund aseguró así un buen punto de partida antes de la liquidación de la liguilla, que tendrá lugar el próximo jueves 18 de julio en el Estadio Haugesund en Escocia.
El juego no fue fácil para ninguno de los dos equipos y así se lo habían planteado los entrenadores en las reuniones previas de trabajo. Ambos son equipos fuertes y venían de alcanzar el paso a esta primera fase de la UEFA, de la mejor manera. Pero solo uno tendría el chance y el Haugesund, de visitante, pegó primero.
Desde el inicio del duelo, Ibrahima Koné, del Haugesund, pronto recibió una tarjeta amarilla y fue reemplazado por razones preventivas: una posible expulsión.
El Director técnico de Haugesund, Jostein Grindhaug, sabía que su líder caminaba sobre una cuerda floja disciplinaria, ya que se había enfrentado previamente con Liam Bagnall y Garry Breen y por eso lo retiró del juego.
Le pasó mucho más adelante al jugador del mismo equipo, Torbjørn Kallevåg, quien vio cómo el juez del partido recogió la tarjeta roja del bolsillo trasero y lo envió a la ducha por jugada peligrosa. También su compañero, Niklas Sandberg, recibió otra tarjeta tras una falta fuerte contra un contrario.
El capitán decidió
FK Haugesund gobernó la mayor parte del juego contra Cliftonville. Rescató las líneas y permitió que el mediocampista Ibrahima Koné se luciera colocando balones estratégicos, que llevaron peligro al arco defendido por Richard Brush.
Torbjørn Kallevåg, por ejemplo, mediocampista, coordinó de manera centralizada la mitad del campo, y en una asistencia a su compañero Mikkel Desler, le permitió a éste lanzar una fuerte pelota que se estrelló contra el poste.
La mejor oportunidad de Cliftonville llegó más allá de la media hora cuando Chris Curran sin marcar, dirigió un balón casi agonizante lejos del objetivo.
En el rebote aprovechó con buena resolución Christian Grindheim, capitán del equipo escocés, que marcó el 1-0 en el minuto 41.
Ya al principio del segundo tiempo, después de la charla táctica y el descanso, Haugesund tomó otra vez la delantera.
Grindheim se llevó un balón que pudo ser el 2-0 tras un tiro libre de Niklas Sandberg que logró salvar de manera inteligente el arquero local.
La respuesta del Cliftonville
A partir de entonces, los Rojos comenzaron a mostrar un poco más de confianza en sí mismos. Jugaron más arriba, tuvieron un cruce de balón de Conor McMenamin que pudo contener el arquero Helge Sandvik.
Ryan Curran casi tuvo un impacto inmediato después de salir del banco cuando le dio una bola limpia a McMenamin. Este la entregó rápido e hizo que Donnelly colocara un cabezazo en las manos de Sandvik.
Los locales se pellizcaron y, para el segundo período, replantearon su esquema y crearon varias oportunidades que bien podrían haber terminado en gol, pero no hubo ni puntería… ni suerte.
El tiempo se fue desgastando y los anfitriones vieron como las buenas oportunidades de marcar no daban resultado y que los tres puntos se esfumaban dentro de sus pretensiones.
Por su parte, el FK. Haugesund, parecía feliz con su mínima ventaja provisoria y, de manera inteligente, reafirmó las marcas atrás, cuidó el balón y contuvo los ímpetus de su adversario que no logró nunca vulnerar su arco.
Una historia muy cercana la del Haugesund
El Fotballklubben Haugesund es un club de fútbol noruego de la ciudad de Haugesund. Fue fundado en 1993 y juega en la Tippeligaen.
Fue finalista de la Copa de Noruega en 2007 y ha participado en tres temporadas de la UEFA Eropa League en tres temporadas: 2014-2015, 2017-2018 y en esta de 2019-2020.No ha pasado nunca de la segunda fase clasificatoria, pero el equipo se nota cada vez más maduro y los resultados se le están dando.
Tiene ya una primera ventaja a su favor: los puntos de visitante, que no es cualquier cosa. Pero el equipo rival, el Cliftonville, no es un conjunto fácil. Al contrario, es un club de tradición e historia que ya ha resuelto situaciones peores que esta en el pasado y que saldrá con todo a la revancha.
El jueves será a otro precio
El jueves, en el Haugesund Stadion, en Escocia, todo se jugará a otro precio, pues el Cliftonville tendrá que arriesgar mucho más para empatar y superar una ventaja mínima de los llamados Árabes.
Los visitantes, seguramente, reforzarán más el ataque y la puntería que en esta última oportunidad falló en repetidas veces.
A los que jugarán de locales los asiste la confianza de haber ganado los primeros tres puntos, contar con sus hinchas que, de seguro, ocuparán las más de 8.000 plazas con que cuenta el estadio, además de la energía y el acompañamiento durante todo el juego.
Ambos equipos tienen la calidad y la capacidad de lograr el cupo
Nada está escrito ni dicho en este par de la primera ronda de clasificación de la UEFA Europa League. Cualquier cosa puede pasar. Tanto el Cliftonville como el Haugesund tienen la capacidad y el fútbol necesario para encarar una nueva fase de esta importante competencia europea.
Las apuestas ya comenzaron a moverse en los portales de Internet. Los preparativos están dados, solo falta la hora de la verdad y el reloj se acerca cada vez más a ella.
¿Quién ganará el partido? ¿Será el técnico Jostein Grindhaug o su contrincante Paddy McLaughlin?. Aún no se sabe.
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